La carta de una madre al saber que su hijo no ha sido invitado a una fiesta por tener Síndrome de Down

En muchas ocasiones, descubrimos que el hombre, aunque sea llamado ser humano, carece de humanidad. Y es que se deja llevar por prejuicios, rechaza al que es diferente y únicamente piensa en sí mismo. Casos que vienen a dejar patente esto que estamos planteando hay muchos y muy variados y el último acaba de convertirse en viral en la Red. En concreto, nos estamos refiriendo al que gira en torno a un niño con síndrome de Down que ha sido el único compañero de su clase que no ha sido invitado a una fiesta por tener esa alteración genética. Un rechazo que, como no podía ser de otra manera, ha causado un gran dolor en la madre del menor que no ha dudado en contar lo ocurrido en la red social Facebook y en dirigir una carta a los padres de esos menores que decidieron que su hijo no tenía que divertirse con el resto.

Los protagonistas

En Canadá es donde ha tenido lugar este hecho, que ha saltado a todos los medios de comunicación internacionales y que cuenta con dos principales protagonistas:

• Sawyer, el pequeño de 8 años que tiene síndrome de Down.

• La madre del menor excluido, Jennifer Kiss-Engele, que está sufriendo por descubrir cómo su hijo a tan corta edad está padeciendo el rechazo de la sociedad sin razón ni motivo.

Los hechos y la carta en Facebook

El origen de lo acontecido se encuentra en el momento que uno de los compañeros de clase de Sawyer decide que va a celebrar una fiesta en casa. Celebración a la que se invita a todos los niños de la misma salvo a uno, al hijo de Jennifer. Esta no tenía conocimiento de nada hasta que, por distintos motivos, acaba enterándose de lo sucedido, concretamente de que todos los menores cuentan con su invitación a excepción de su pequeño.

El enterarse de esta situación generó un gran dolor en la madre que, como una manera de desahogarse y de poder dirigirse a todos los padres de esos menores, optó por hacer uso de la red social Facebook. En concreto, no dudó en redactar una carta pública dirigida a esos adultos que comienza de la siguiente manera:

“Hola a todos!
Sé que no nos conocemos muy bien, pero mi hijo Sawyer y su hijo están en la misma clase. Tengo entendido que su hijo recientemente ha entregado invitaciones de cumpleaños para toda la clase excepto a Sawyer, que no estaba invitado. También entiendo que esto no fue un descuido de su parte, que fue una decisión de no incluir a mi hijo.
Quiero que sepa que no tenemos una expectativa de ser invitado a cada fiesta de cumpleaños. De hecho, cuando Sawyer celebró su cumpleaños el año pasado solo invitó a unos amigos cercanos porque queríamos hacerlo pequeño. Pero en tu caso, esta no es la misma razón. De hecho, ha invitado a todos, a 22 niños de la clase excepto a mi hijo. Sé que no es porque no es divertido, tiene un gran sentido del humor y una risa contagiosa. Sé que no es porque su hijo y él no se llevan bien, se ha traído el nombre de su hijo en varias ocasiones. La única razón por la que decidió que era bueno no invitar a mi hijo a su fiesta de cumpleaños es porque él tiene síndrome de Down.
Lamento que usted no esté informado, tal vez tenga miedo, o inseguridad acerca de lo que significa que tenga el síndrome de Down. Sé que si supiera más sobre el síndrome de Down no tendría que tomar esta decisión. No estoy enojada con usted. Más bien, creo que esta es una oportunidad para que pueda conocer a mi hijo mejor. Ya ve, tener el síndrome de Down, no quiere decir que no quiere tener amigos. Eso no significa que no tenga sentimientos. Eso no significa que no le guste ir a fiestas de cumpleaños. Las personas con síndrome de Down quieren las mismas cosas que usted y que yo. Quieren tener relaciones cercanas, quieren sentir el amor de Dios, quieren contribuir, quieren tener vidas llenas de sentido, y quieren ir a fiestas de cumpleaños.”

Y al final…

Más de 31.000 reacciones generó la carta de esta madre en Facebook, sin olvidar que la misma fue compartida más de 9.000 veces y que le han dejado más de 3.700 comentarios. Pero ahí no quedó todo. A raíz de sus palabras, y como ha dado a conocer después también a través del citado perfil, el padre de uno de los compañeros de clase de Sawyer decidió hacer algo ante lo sucedido. En concreto, optó por organizar una fiesta a la que, como no podía ser de otra manera, el pequeño con síndrome de Down ha estado invitado al igual que los demás niños. Y eso ha llenado de satisfacción a Jennifer, no ya sólo por lo que ha supuesto para su hijo sino también porque es una manera de que la sociedad no deje de lado a las personas con necesidades especiales.