Oscar, el bebé de diez meses que siente el rechazo diario de todo el mundo

Igual que se habla de la solidaridad del ser humano o de su capacidad de ayudar a los demás, tampoco hay que olvidar que, en más de una ocasión, ese ha podido demostrar todo lo contrario, que resulta tan deleznable como hiriente en ciertas actitudes. Y si no que se lo pregunten al pequeño protagonista de esta historia, un bebé de tan sólo diez meses de edad que es rechazado a diario por multitud de personas simplemente porque su aspecto, por una enfermedad rara, es diferente.

El niño

Oscar Lagnham. Este es el nombre del pequeño británico de menos de un año, que vive en Leek (Staffordshire) junto a su familia y que, como hemos mencionado anteriormente, día a día se topa con el rechazo de los demás. Y es que le miran con cara de cierta repugnancia, no dudan en pasar de largo cuando se les acerca en el parque, no quieren hacerle ninguna carantoña…Todo porque vivimos en una sociedad donde parece que lo único importante es la imagen y porque precisamente este bebé no tiene un aspecto típico. No lo tiene por culpa de una enfermedad rara.

Su enfermedad

Histiocitosis. Este es el nombre de la patología que sufre el bebé y que le fue diagnosticada hace seis meses. La misma es la causante de que todo su cuerpo presente una ingente cantidad de granos similares a los que provoca la varicela, concretamente en la zona de la cara. Granos que responden al nombre de gránulos de Birbeck.

Se identifica además porque la misma es fruto de que el organismo tiende a acumular lo que es una cantidad ingente y anormal de glóbulos blancos que son inmaduros. De la misma manera, otros datos que merece la pena conocer de esa son los siguientes:

• Por regla general, aparece en edades infantiles.

• Puede tener afectaciones en órganos tales como el hígado o el pulmón.

• Existen diversos tipos de histiocitosis, entre las que se encuentran algunas realmente graves como el sarcoma histiocítico o la leucemia monocítica aguda. En base a la variante que sea se optara por un tratamiento u otro, que no sólo se sustentará en lo que son medicamentos sino que puede llegar incluso a tener que acometerse mediante quimioterapia.

• La enfermedad específica que sufre el protagonista de este artículo es la conocida como histiocitosis de células de Langerhars, que se descubrió por primera vez en la segunda mitad del siglo XIX.

El proceso

Desde que nació, Oscar presentaba una serie de manchas en el cuerpo. No obstante, como su propia madre (Steph Webster) ha reconocido a diversos medios de comunicación, pensaron que se trataría de las habituales erupciones que tienen muchos bebés nada más venir al mundo y que luego, por sí solas, van desapareciendo.

Sin embargo, con el paso del tiempo se dieron cuenta que esas manchas no sólo no se eliminaban sino que estaban aumentando en número e incluso se estaban volviendo mucho más virulentas. Por eso, consultaron al médico y este les vino a informar de que la situación era mucho más grave.

Así, se le realizaron distintas pruebas y finalmente se llegó a la conclusión de que sufría la mencionada enfermedad rara. De ahí que se tomara la decisión de ponerle un tratamiento para ver cómo reaccionaba y si se conseguía hacer desaparecer esas erupciones que tenía en el cuerpo.

De esta manera, fue como comenzó un auténtico calvario para el menor que, desde entonces, ha tenido no sólo que hacerle frente a un tratamiento con esteroides sino también incluso, peor aún, a quimioterapia. Sin embargo, por el momento no se ha conseguido mejorar en absoluto la situación de Oscar. Y es que parece que sus células de Langerhans inmaduras son más “fuertes” de lo que se presuponía.

Rechazo

Los padres del bebé no sólo se encuentran preocupados por el estado de su hijo y porque los médicos no encuentren la solución a la enfermedad sino también por el rechazo constante que, día a día, tiene que sufrir el menor. Así, la mujer no ha dudado en reconocer que cuando salen a pasear la gente se queda mirándolo, los viandantes hacen comentarios e incluso llegan a señalarle. Pero no sólo eso, si no que llegan a preguntar si es que tiene varicela y hay quienes no quieren ni acercarse por creer que tiene alguna patología contagiosa.

Situaciones todas estas que llenan de dolor a sus papás que reconocen que el momento más duro que han vivido en ese sentido hasta ahora tuvo lugar en navidad, cuando tuvieron que rogarle al Papa Noel de un centro comercial que cogiera a su hijo como a cualquier otro, porque rechazaba hacerlo al creer que tenía una enfermedad peligrosa y contagiosa.