Biopsia corial ¿Qué es?

Todas las mujeres que se encuentren embarazadas por primera vez deben ponerse al día acerca de todo el conjunto de pruebas que tienen que realizarse durante el periodo de gestación, tanto en pro de su salud como en la de sus bebés. Pero no sólo de las que son habituales sino también de otras específicas que les puede solicitar el médico cuando hay riesgos para sí mismas o cuando se considera que los pequeños pueden tener una anomalía.

La amniocentesis o el triple screeningCalen son algunas de esas citadas pruebas especiales y a ambas se suma la que ahora queremos dar a conocer a las primerizas: la biopsia corial.

¿Qué es?

Se trata de una prueba diagnóstica e invasiva, también conocida como biopsia de corion, que tiene como objetivo poder conocer si el feto sufre malformaciones o enfermedades genéticas. Básicamente consiste en tomar una muestra de la placenta para poder analizar y averiguar si el bebé presenta esos problemas citados o no.

¿Cuándo se realiza?

Se lleva a cabo en el periodo comprendido entre las semanas 10 y 14 de embarazo en los casos en los que hay un riesgo patente de que el pequeño presente patologías o malformaciones como las ya expuestas:

• Cuando la ecografía realizada deja patente que el crecimiento del feto no es el adecuado.

• Cuando el padre o madre cuente con enfermedades genéticas.
• Cuando la mujer ya tenga un hijo anterior con anomalías.
• Cuando se le han hecho pruebas a la gestante que han venido a dejar patente que hay un elevado riesgo de que su bebé pueda sufrir enfermedades embrionarias.

¿Cómo se lleva a cabo?

Por regla general, la biopsia corial se puede llevar a cabo mediante dos sistemas diferentes:

1-Vía transcervical, que se puede acometer durante el periodo comprendido entre la semana 10 y la 14 de embarazo. Como su propio nombre indica, consiste en tomar la muestra de la placenta a través de la vagina y del cuello del útero, empleando un espéculo y una pinza, aunque, en ocasiones, también se usa una cánula.

2-Vía transabdominal, que es viable entre las semanas 11 y 14 del periodo de gestación. En este caso, el profesional médico realiza a la mujer una punción en el abdomen, utilizando un trócar y una pinza.

La diferencia entre ambas es que la primera permite obtener mayor cantidad de muestra. No obstante, la elección de una u otra estará en manos del médico, que dictaminará cuál es la más adecuada en cada caso.

Eso sí, con cualquiera de las dos técnicas se consigue tener un resultado certero en un plazo máximo de 48 horas. No obstante, hay en algunos casos, concretamente en un 2%, en los que no resulta concluyente, por lo que será necesario tener que someter a la mujer a otra prueba específica diferente para poder salir de dudas sobre el estado del feto.

Es importante, además de todo lo expuesto, que no está recomendado ni llevarse a cabo antes de la semana 10 ni tampoco que se sometan a la misma a la mujeres mujeres con hepatitis (B o C) o con VIH.

Otros datos de interés relativos a la biopsia de corion es que tiene una duración de entre 30 a 60 minutos, en base a la preparación que se lleve a cabo y al método usado, y que la embarazada puede marcharse a casa después de la misma, sin necesidad de hospitalización. Eso sí, se recomienda que esté, al menos, en reposo durante las 24 horas siguientes.

¿Tiene riesgos?

Como ya dijimos al principio del artículo, esta biopsia es una prueba de tipo invasivo y eso supone, entre otras muchas cosas, que entrañe una serie de peligros, bien para la madre o bien para el bebé. En concreto, los riesgos que trae consigo son los siguientes:

• En el caso de que se realice mediante la vía transabdominal, la mujer puede tener dolores de cierta intensidad en la zona donde se le ha realizado la punción.

• Por el contrario, las futuras mamás que son sometidas a la técnica transcervical pueden sufrir sangrado vaginal.

• Diversos estudios llevados a cabo al respecto, coinciden en subrayar que hay el mismo riesgo de que se provoque un aborto que cuando se lleva a cabo una amniocentesis. Y este estaría en torno al 1%.

• De la misma manera, también hay una probabilidad del 1% de que esta prueba ocasione desde una infección en el líquido amniótico, la llamada corioamnionitis, hasta una rotura de membranas, entre otras cosas.

• Asimismo no debe pasarse por alto que también pueden producirse, como así lo manifiesta el doctor David Saceda (Especialista en Medicoquirúrgica), desde cuadros de fiebre en la mujer hasta una perforación de otros órganos. No obstante, subraya que esto último es bastante improbable.