El Mallorca, ante su temporada 30 en Primera

El próximo lunes, a las 17.30 horas, el Mallorca entrará en su temporada número 30 en Primera División. Un número redondo desde que debutara en la máxima categoría un 11 de septiembre de 1960 en el desaparecido campo de Heliópolis ante el Betis. Perdió 2-0 y el primer mallorquín que vistió la camiseta roja en Primera fue Julià Mir. Otro mallorquín, Joan Forteza, sería quien siete días después tendría el honor de ser el autor del primer gol del equipo entre los grandes, abriendo el marcador ante el Racing en un partido que acabó con victoria bermellona por 2-1. 62 años han pasado desde entonces.

Durante su primera etapa en Primera el Mallorca fue un equipo ascensor. Se mantuvo durante tres temporadas seguidas hasta que descendió en 1963 en una promoción ante el Espanyol resuelta en un partido de desempate en el Santiago Bernabéu y luego, en sus tres siguientes ascensos, en 1965, 1969 y 1983, no pudo pasar de estar un solo año entre la elite del fútbol español.

La tendencia cambió por primera vez en la temporada 86-87 de la mano de Serra Ferrer. En la Liga del play off el Mallorca firmó la mejor clasificación de su historia, un sexto puesto que le dejó a un paso de jugar en Europa por primera vez. Sin embargo aquello fue flor de un día. En la campaña siguiente, y en otra promoción, ahora ante el Oviedo, volvió a caer en el pozo de Segunda División.

Se levantó rápido, de nuevo de la mano de Serra Ferrer, y apoyándose en una generación de jugadores formados en la cantera del Barça, como Fradera, Sala, Pedraza o Serer, además de la espectacular aparición del mallorquín Miquel Àngel Nadal, llegó en julio de 1991 a su primera final de Copa del Rey. La perdió en el Santiago Bernabéu ante el Atlético de Madrid, pero aquel fue el primer día en el que la afición mallorquinista vivió un sueño que no podía ni imaginarse.

El sueño volvió a acabar en pesadilla en 1992, el año de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Allí comenzó una travesía en el desierto que se prolongó durante cinco largos años en los que el Mallorca no pudo salvar la barrera de la desaparición. Todo cambió con la aparición del Grupo Zeta y del doctor Beltrán, que en 1995 le compraron el club a Miguel Dalmau. El primer año se perdió la promoción ante el Rayo pero a la segunda tentativa, ante el mismo rival, el equipo superó la trampa de Vallecas y regresó a Primera. Un regreso que lo cambiaría todo.

En 1997, de la mano de Bartolomé Beltrán y un desconocido entrenador llamado Héctor Cúper, comenzó la edad de oro del Real Mallorca. El equipo se mantuvo en Primera durante 16 temporadas consecutivas en las que logró dos terceros puestos, uno con el propio Cúper y otro con Luis Aragonés, jugó dos finales de Copa de las que ganó una en 2003 y perdió otra por penaltys en 1998, ganó una Supercopa de España y disputó en mayo de 1999, en el Villa Park de Birmingham, la final de la Recopa de Europa. Cayó 2-1 ante la Lazio, pero aquel fue el culmen de una era que también dejó para el recuerdo una participación en la Liga de Campeones, la más importante competición del mundo por clubes.

Tras la final de Copa ganada al Recreativo en 2003 comenzó lentamente el deterioro del club. El Grupo Zeta abandonó el control, entraron accionistas mallorquines y la falta de músculo económico, sumada a las enormes deudas acumuladas en época de bonanza, llevaron al Mallorca a declarar en 2010 concurso de acreedores. Serra Ferrer volvió para liderar una última intentona de resucitar al club con capital indígena, pero eligió muy mal a sus compañeros de viaje y el Mallorca entró en una espiral de autodestrucción que en 2013 le llevó a Segunda División de nuevo.

Seis años costó en esta ocasión regresar a la máxima categoría, previo paso además por Segunda División B. El Mallorca ascendió en la noche de San Juan de 2019 con el gol de Abdón al Deportivo. Su presencia entre los grandes fue de nuevo efímera ya que cayó en la temporada la pandemia, pero de la mano de Luis García Plaza regresó de inmediato después de una Liga triunfal, la mejor de su historia en Segunda. In extremis se evitó un nuevo descenso la pasada temporada y ahora toca estabilizar al equipo en la categoría de oro del fútbol español, aunque desde luego parece un sueño imposible repetir aquellos dos terceros puestos o incluso los dos sextos que firmaron Serra Ferrer y Héctor Cúper.

El lunes arranca la nueva temporada. Será el partido 1065 en Primera División. Se han ganado 352 y se han perdido 441, por lo que el balance sigue siendo negativo. El próximo gol en contra será el 1.500 en Primera, mientras que se está a 42 de lograr el 1.300 a favor. La mayor goleada fue un 7-1 al Recreativo en Son Moix en marzo de 2008 seguida por un 1-5 al Real Madrid en el Santiago Bernabéu en mayo de 2003. La peor derrota, un 7-0 en el Calderón ante el Atlético de Madrid en 1988.

Miquel Ángel Nadal, con 255 partidos, es el futbolista que más partidos ha jugado con el Mallorca en Primera. De la plantilla actual el que más lleva es Dani Rodríguez con 73, sólo uno más que Martin Valjent. Raíllo disputará en San Mamés su encuentro número 50 con el equipo en la máxima categoría. Samuel Eto’o, con 54 goles, es el máximo realizador. Dani Rodríguez lidera también este ranking en la actual plantilla, pero con apenas ocho tantos.

El Mallorca empezará y acabará la temporada en la posición 18ª del ranking histórico de la categoría. Era el 17º, pero le superó el Villarreal, que suma 32 puntos más. Por abajo es inalcanzable para el Oviedo, que sigue en Segunda. El reto más plausible sería el Racing de Santander, 15º en la actualidad con 1.415 puntos, 195 más que el Mallorca, pero para superarlo harán falta más de cuatro temporadas.