El Gobierno vasco trabaja en un borrador de política penitenciaria propia con familiares de etarras

El Gobierno vasco trabaja ya en un borrador de política penitenciaria propia ante la posibilidad de que, tras las negociaciones iniciadas entre el PNV y el PSOE para la aprobación de los presupuestos, las competencias de prisiones sean transferidas a la institución autonómica.

Fuentes próximas a los nacionalistas vascos confirman a OKDIARIO que la cesión de la materia penitenciaria es una de las condiciones planteadas por el PNV en la mesa de negociación con Sánchez. Hecho que hará necesario «el desarrollo de una política penitenciaria propia» y, en ese sentido, se están produciendo diferentes avances y contactos institucionales.

La asociación Etxerat, vinculada al entorno etarra e integrada por familiares de los presos terroristas, comparecía el pasado día 2 de octubre para participar en la Comisión de Trabajo y Justicia del Parlamento Vasco.

Urtzi Errazkin y Patricia Velez, portavoces de Etxerat, se incorporaban a la misma en el contexto del trabajo que el Gobierno vasco desarrolla en dicho ámbito. Etxerat hacía pública su comparecencia y reflejaba en su página web  que sus interlocutores asistieron para aportar «la experiencia y el testimonio de tres décadas de conculcaciones de derechos y sufrimiento, derivados de las políticas penitenciarias de excepción».

La eventual transferencia de prisiones -condición del PNV a Sánchez el pasado mes de junio previo respaldo a la moción de censura socialista contra Rajoy- hará necesario para el Gobierno vasco «el desarrollo de una política penitenciaria propia» y, en ese sentido, se están produciendo diferentes avances y contactos institucionales.

Misión y objetivo del Gobierno vasco

El Gobierno vasco se apoya en el Estatuto de Gernika y recuerda al Ejecutivo que en el texto se «prevé la transferencia de la competencia de los centros penitenciarios al Gobierno Vasco en cumplimiento de lo que establecen sus artículos 10.14 y 12.1 » y que «cuando han pasado37 años de la aprobación de esta Ley Orgánica, todavía sigue sin hacerse efectivo el traspaso de esta competencia».

Así lo recoge un informe confeccionado por la Secretaría General para la Paz y la Convivencia, en el que se recoge una compilación de textos sobre la materia generados por el Gobierno vasco entre 2012 y 2016. En el documento, consultado por OKDIARIO, se fijan los principios de actuación de la institución autonómica en el ámbito de la política penitenciaria y las líneas de actuación estratégicas para su modificación durante la legislatura actual. 

El Ejecutivo vasco reconoce que «la política penitenciaria tiene una incidencia directa en el objetivo democrático de la normalización social de la convivencia». Por ello, el PNV trabaja en el borrador de lo que será la aplicación de una política penitenciaria propia que «promueva la finalidad resocializadora de la pena privativa de libertad y que haga posible la revisión crítica del pasado y el reconocimiento del daño causado», en referencia a los presos etarras a los que da el tratamiento de «víctimas».

El Gobierno vasco se propone reactivar, con dicho borrador, el «estado de parálisis» al que reconoce «ha estado sometida la cuestión de la política penitenciaria» en los últimos 4 años y plantear las condiciones para que en la actual legislatura, y en base a la oportunidad vigente, pueda «abordarse una nueva política penitenciaria y de reinserción» .

Entre sus reivindicaciones: la transferencia de la competencia de prisiones al Gobierno Vasco; la articulación del proceso de acercamiento de los presos; el establecimiento de «soluciones humanitarias para los presos enfermos», en aplicación del artículo 104.4 del actual Reglamento penitenciario; o, confeccionar «medidas de sentido común para aquellos presos cuyas condenas están relacionadas con actividades políticas, antes ilegalizadas, y ahora legales».