“No somos tan ricos ni tan listos como para prescindir de la energía nuclear”

El presidente del Foro Nuclear, Antonio Cornadó, lanza un mensaje a los partidos políticos de cara a la próxima legislatura: la energía nuclear lidera la producción de electricidad en España y prescindir de ella dispararía los costes de las empresas y las facturas de los hogares. “No somos tan ricos ni tan listos como para prescindir de la energía nuclear”, ha declarado Cornadó durante la presentación del informe anual que elabora su organización.

Y es que la energía nuclear ha vuelto a ser la principal fuente energética a la hora de producir electricidad, con  un 20,34% del total. A pesar de que la práctica totalidad de los partidos políticos (con la tímida excepción del PP) quieren que tarde o temprano los siete reactores actuales cierren sus puertas, la realidad es que la energía nuclear es necesaria para garantizar la competitividad de las empresas y para limitar el coste de la factura que pagan los hogares.

“Es imprescindible conseguir que tanto la opinión pública como los políticos diferencien la percepción de la realidad. Las decisiones sobre el futuro de la cesta energética deben adoptarse en virtud de criterios técnicos, garantizando el suministro con la máxima seguridad. No se pueden aplicar vetos, ni usar apriorismos ni acometer segregaciones”, ha señalado Cornadó, en referencia a la propaganda antinuclear que se ha instalado en el seno de los partidos.

En los programas electorales presentados de cara a los comicios del 20 de diciembre pasado, PSOE, Ciudadanos y Podemos incluyeron apartados en sus medidas de política energética en los que pedían el cierre de las centrales nucleares”. El partido de Pedro Sánchez reclamaba el fin de la energía nuclear cuando los reactores “lleguen al final de su vida útil”, mientras que la formación de Albert Rivera prometía realizar un “cierre progresivo” y la de Pablo Iglesias un desmantelamiento inmediato. Por su parte, el PP señalaba que es necesario el “mantenimiento de las centrales como elemento del mix energético”.

El CSN puede autorizar la reapertura de la central de Garoña

En la actualidad, existen ocho centrales, de las cuales siete están operativas. El reactor de Garoña está parado pendiente de la renovación de la autorización de explotación, que fue solicitada por el titular de la instalación, Nuclenor, en mayo de 2014. La pelota está en el tejado del Consejo de Seguridad nuclear (CSN), cuyos técnicos están ultimando el informe que podría permitir a la central operar hasta 2031. Aunque no está previsto que la luz verde reciba la unanimidad del CSN todo parece apuntar que en julio se dará la autorización, después de las elecciones generales. La mayoría de los siete reactores restantes deberán solicitar sus renovaciones en 2020, tal como se aprecia en el siguiente cuadro.

La postura del Foro Nuclear sobre las renovaciones es clara: se debe permitir operar a las instalaciones siempre que puedan realizar su labor con total seguridad. “No se deben tomar las decisiones de forma frívola o impulsiva y hay que considerar todas las consecuencias, por eso son los técnicos del CSN los que deben pronunciarse sobre las renovaciones sin ningún tipo de injerencia política”, ha apuntado Cornadó.

“Respaldamos y promovemos como estrategia energética acertada la operación a largo plazo del parque nuclear nacional, algo que ya se está haciendo en países como Estados Unidos donde actualmente 81 de sus 99 reactores tienen concedidas autorizaciones para operar hasta los 60 años. Para ello, es necesario que haya estabilidad regulatoria y seguridad jurídica, certidumbre administrativa, equidad fiscal y tributaria para las distintas tecnologías y priorización de las decisiones técnicas en materia de política energética”, tal como ha señalado el presidente del Foro.

«Es necesario que haya estabilidad regulatoria y seguridad jurídica, certidumbre administrativa y equidad fiscal»

“Los indicadores de funcionamiento, que son parámetros estandarizados y homologados internacionalmente, han demostrado una vez más la excelente operación de las centrales nucleares españolas en 2015, superando sus resultados a la media mundial. Por tanto, mantener la operación del parque nuclear, siempre que su funcionamiento sea seguro y cumpla los requisitos establecidos por el organismo regulador, es una estrategia necesaria y viable, tal y como refleja la experiencia en otros países”, señala el Foro en su informe anual.

La gestión de los residuos: el Almacen Temporal Centralizado (ATC)

Cornadó también ha hecho referencia al Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares en Villar de Cañas (Cuenca). A preguntas de los periodistas ha indicado que este emplazamiento concreto no le parece “ni bien ni mal”, sino que lo importante es tener un ATC por las ventajas que aporta en términos de seguridad, gestión, control y costes. El retraso en la puesta en marcha de esta infraestructura está propiciando que las centrales pongan en marcha almacenes individualizados (los denominados ATI).

En la actualidad las centrales de Trillo, Ascó y José Cabrera tienen estos almacenes temporales individualizados. Por su parte, Almaraz lo ha solicitado al Ministerio de Industria y Garoña tiene autorización. A 31 de diciembre de 2015 los residuos nucleares irradiados almacenados en las piscinas de las centrales nucleares españoles han registrado ocupaciones que van desde el 79,9% de Vandellós II al 97% de Ascó I. Estos elevados porcentajes ilustran la necesidad de los ATI y el ATC. Durante el pasado año se generaron 756 metros cúbicos de residuos, de los que 551 fueron retirados por la empresa pública Enresa.