Nike manda un ultimátum al Barça por su nueva camiseta

La Junta Directiva del Barcelona se encuentra en una situación límite por culpa de la camiseta que vestirá el club el año próximo. No sólo porque no se ha firmado con ningún sponsor para ocupar el lugar de patrocinador principal en la elástica, sino porque si se demoran mucho más tiempo se verán obligados a abonar una indemnización a la marca Nike por no cumplir con los plazos establecidos.

Josep María Bartomeu acordó enviar a la marca deportiva Nike el diseño definitivo de la camiseta que luciría el equipo en la temporada 2016/17 antes del 31 de octubre de 2015 en previsión del verano concurrido al que se enfrenta la firma por suministrar a diversos países en los Juegos Olímpicos. Pues bien, a día de hoy no se ha fabricado ni un modelo en la fábrica de Oregon porque las negociaciones con los distintos patrocinadores han fracasado.

El Barça pidió una prórroga de tres meses a dicho acuerdo inicial. El club intentó cerrar un acuerdo con Qatar Foundation sin éxito a finales de 2015. Las negociaciones se rompieron por las altas pretensiones de Bartomeu y los suyos tras ganar cinco títulos de seis posibles. Pidieron 100 millones por la camiseta y el naming del Camp Nou cuando se había alcanzado un acuerdo anterior de 60 millones anuales con el ex vicepresidente Javier Faus .

Fue entonces cuando el Barcelona comenzó a sondear el mercado e inició sus negociaciones con la marca de refrescos Pepsi. Fue un tira y afloja entre ambas entidades que no ha llegado de momento a buen puerto. Cabe recordar que Qatar posee un derecho a tanteo ante otras ofertas que pueda recibir la entidad azulgrana.

Nike mete presión por los Juegos Olímpicos

Con las negociaciones aún calientes, Nike volvió a conceder otra prórroga al club que expiró al término del mes de abril. Según ha podido saber OKDIARIO, el fabricante estadounidense presiona a los culés con comenzar la fabricación de la nueva camiseta sin poner el logo del patrocinador.

Los norteamericanos sólo se contentarían si el Barcelona paga una indemnización por retrasar la fabricación en masa de la camiseta. Nike tiene un verano concurrido en sus fábricas por culpa de los Juegos Olímpicos de Río, donde vestirán a más de medio millar de países participantes. El Barcelona, además, se enfrentará en dos años a renovar un contrato que anualmente le reporta 35 millones de euros y un porcentaje en función de la venta de camisetas.